Gracias a
la referencia de Pedro Olivera me puse a revisar esta
publicación. Los primeros comentarios son sobre la primera parte del trabajo y el anexo metodológico, recomiendo leerlo en ese orden. Básicamente es la presentación del marco teórico de su posterior aplicación.
No leí muchos libros que se preocupen en delimitar y exponer los alcances de las teorías en las que se basan, debe ser así porque es una buena manera de evitar criticas fáciles, éste no es uno de esos libros.
En la primera parte del libro y en el anexo metodológico, Lo Vuolo lo expone de una forma muy transparente, es muy fácil identificar los aportes de dos escuelas de pensamiento, los post-keynesianos (Kaldor, Kalecki y Lavoie principalmente) y los regulacionistas, además de Keynes como base de ambos y punto de partida para una teorización de la demanda efectiva como motor de los regímenes de acumulación en corto plazo (Keynes) y largo plazo (Post-Keynesianos y regulacionistas). En resumen podría decir que son Théret, Orléan, Boyer, Aglietta Pasinetti, Kaldor, Kalecki, J. Robinson y Keynes los fundadores teóricos de este libro.
Evidencia una macroeconomía distinta, una macro además CUALITATIVA preocupada por razonar las relaciones sociales y su vínculo con las relaciones técnicas de producción y distribución, un verdadero compendio de Economia Política contemporánea que tiene siempre en mente la distinción entre el tiempo lógico e histórico, originaria de Joan Robinson y reivindicada por Marc Lavoie.
Hace un buen tratamiento de las teorías en el marco de la historia del pensamiento económico y lo mismo corre especialmente para Keynes. Es difícil encontrar autores donde no haya nada que objetar en el tratamiento de Keynes, discutiría solo sobre la nombrada (y mal inferida desde mi punto de vista) tantas veces “ilusión monetaria” en el pensamiento Keynesiano.
Sus propuestas son regulacionistas, pero con dos diferencias, hay una intención de praxis inmediata y explicita, que desde mi punto de vista es necesaria y coherente y se autoproclama estructuralista.
Distingue tres tipos de regímenes de acumulación (para ampliar sobre estas nociones haga click
aquí) Empleo, Demanda Agregada y los liderados por las finanzas pasando a la segunda parte del libro donde hace su interpretación de los regímenes que dominaron la economia argentina desde aprox 1960 hasta el 2006.
La segunda parte del libro es un poco más confusa, aquí propone una tesis clara pero, a mi entender, su demostración no es consecuente con las partes pasadas. Básicamente Lo Vuolo dice que la crisis sufrida 2001/2 no produjo un quiebre y transformación del régimen de acumulación en nuestro país. Según el autor, las formas en que se acumula son similares, con ciertos cambios en precios relativos y en niveles de la macroeconomía en el periodo post-convertibilidad denominado Modelo de Crecimiento con Inserción Social.
La segunda y tercera parte del libro tienden a demostrar que las formas de acumular no han cambiado sino que se han debilitado simplemente, que las características del régimen liderado por las finanzas siguen siendo similares al periodo anterior a la post-convertibilidad.
Hay muchas cosas de esta segunda parte del libro que me parece pertinente cuestionar. La primera es casi intuitiva, la crisis 2001/2 fue tan violenta que las formas monetarias, relaciones laborales, distribución del ingreso y componentes de la DA han cambiado, es demasiado sospechoso que terrible crisis no haya cambiado las formas de acumulación en argentina, de hecho en el mismo libro hay pasajes donde se puede sintonizar con esta última posición particularmente cuando el autor llama “régimen hibrido e inestable régimen de acumulación en argentina”.
El hecho que la deuda pública (y particularmente la externa) siga siendo un problema no quiere decir que las formas institucionales que adopta la misma no hayan cambiado lo suficiente como para romper con parte del régimen anterior de acumulación financiera. En estos sentidos y algunos más mi opinión es completamente distinta a la de Lo Vuolo.
El libro se queda con una especie de reconocimiento parcial de ciertas políticas pero con la queja del “no es suficiente” cosa que está muy bien desde una posición heterodoxa (José Saramago decía que era un pesimista así pretendía el cambio y no se conformaba) sin embargo hay cosas que sucedieron en estos años que evidencian un cambio del régimen de acumulación, o al menos una revolución tan fuerte en todas las formas institucionales
[1] que lo conforman que es difícil no hablar de cambio del régimen de acumulación:
1- Cambios en las formas sociales de ahorro asalariado. Vuelta al sistema de reparto completo.
2- Cambio en la composición de acreedores de la deuda externa
3- Cambio en la composición de moneda de la deuda externa
4- Mejora en los niveles relativos de los indicadores de la deuda externa
5- Cambio en la tendencia regresiva de la distribución del ingreso (frenada desde el 2009)
6- Cambio en la tendencia regresiva del salario (frenada desde el 2009)
7- Aplicación de la asignación “universal” por hijo
8- Cambios en la propiedad del capital privatizado
9- Cambios en la política monetaria
10- Cambios en la política cambiaria, etc
Entre las que creo virtuosas, seguramente falten aquellas a las que refiere Lo Vuolo y que seguramente en su mayoría son necesarias, el problema de la posibilidad sigue existiendo.
Por ultimo me gustaría dejar dos comentarios:
El libro tiene un título que no le hace justicia, se debería llamar desarrollo y crecimiento, es más pertinente. Por otro lado, me ha generado muchas dudas, dudas sobre ciertas relaciones macro, dudas sobre la posición del autor, dudas sobre el devenir de este régimen y dudas sobre todo respecto de las posibilidades de ir un poco más allá. Me gusto a pesar de no compartir su tesis principal.
Es un libro crítico sobre la post-convertibilidad que dice algo distinto incluso a lo que piensan muchos con la misma inclinación teórica.
[1] recordemos las FI
• Relación salarial.
• Estado.
• Moneda.
• Forma de inserción internacional.
• Formas de competencia.