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Creo que los únicos tres argumentos que tienen quienes confían en que la inflación bajará sostenidamente en lo que quede del mandato de Cambiemos son: 1) La reducción de la cantidad de dinero baje la nominalidad de las mercancías. Este argumento vincula causalmente cantidad de dinero a precios aunque con la misma lógica se podría pensar al contrario. Todavía no se conoce prueba que muestre esa causalidad. Aunque de creencias esta hecha la economía, claro. 2) Inflación núcleo con tendencia a bajar. Esto elimina tarifas y precios estacionales del cálculo. El problema es que el argumento deja de lado la OBVIEDAD que la inflación es un fenómeno de poder relativo e interdependiente. Está en los manuales iniciales de economía mas berretas...impulsos inflacionarios son los que generan, por ejemplo los precios administrados (como energía y transporte por caso)...eso dispara otros espirales. Porque, la inflación es un fenómeno de pujas principalmente entre salarios, ganancias y precios relativos, ergo, si los precios relativos cambian bruscamente y no hay represiones sectoriales entonces la inflación se acelera (la única represión sectorial es la salarial pero no la intersectorial, por eso se esta acelerando. El tema es que la generación actual de economistas no estudio lo que sus antecesores de derecha tenían bien claro con las formaciones de precios retenidas-reprimidas en las formaciones socialistas). 3) Que la recesión haga mierda todo y no le queden ganas a nadie de andar acelerando precios. la corrida hacia la baja por liquidar. Infelizmente es un argumento válido para la década del 30, en economías que se manejan con ordenes de pedido y niveles fenomenales de tercerización no es tan fácil andar vendiendo a perdida, el ajuste es por cantidades (creo yo...veremos), entonces puede menguar pero con caída de producto y así sucesivamente.
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